Cada año se abren más de 4.000 expedientes a menores por delitos de violencia filio-parental, pero sólo se denuncian los casos más graves, entre un 10% y un 15% del total. Creemos que este fenómeno debe ser abordado como un grave problema social y por ello lanzamos la campaña de sensibilización “Violencia filio-parental. Una realidad invisible”, a través de la cual te proponemos conocer, analizar y actuar para visibilizar y prevenir el conflicto familiar.
Para abordar el fenómeno, el primero paso es conocerlo. Por ello, hemos analizado los datos que aporta la Memoria de la Fiscalía General del Estado. Así, el organismo indica que los expedientes abiertos a jóvenes por este tipo de delito han aumentado año tras año desde 2013 hasta alcanzar las 4898 denuncias de padres/madres a hijos/as durante el año 2015. Desde 2013 hasta 2015, los expedientes abiertos a jóvenes por cualquier tipo de delito han disminuido un 10,02% (29428 a 26425), mientras que los casos de violencia filio-parental han aumentado un 5,13% en el mismo periodo (4659 a 4898).
Con el objetivo de que familias que atraviesan diferentes situaciones de conflicto con sus hijos e hijas puedan analizar su propio caso, hemos creado un test de detección del conflicto familiar. Creemos que la adolescencia es una etapa complicada en la que los jóvenes refuerzan su personalidad y aparecen los conflictos familiares. Existen ocasiones en las que detectamos ciertas actitudes en nuestros hijos e hijas que nos pueden hacer pensar que el conflicto es alto, pero ¿cómo saber si se trata de actitudes que se dan en la adolescencia o si nos estamos enfrentando a un problema de más envergadura?
A través de nuestro test de detección del conflicto familiar analizamos los factores de riesgo, la modificación de conducta paternal para evitar el conflicto, la no aceptación de la autoridad, el maltrato psicológico y la violencia física y conociendo los resultados de este test llegamos a la fase de actuar ya que, a la hora de acompañar a nuestro hijo o hija en su crecimiento y maduración, así como en su correcta socialización, debemos tener en cuenta diferentes aspectos.
Con el objetivo de mejorar la dinámica familiar, el vínculo afectivo y la comunicación, nuestro equipo educativo ha elaborado un decálogo de buenas prácticas para padres y madres que permita a las familias actuar en los casos en los que no existe conflicto o hay un conflicto moderado. Del mismo modo, para los casos en los que el conflicto forma parte de la dinámica familiar, señalamos las diferentes alternativas que existen para abordar el fenómeno.
¡Entra en fundacionamigo.org/realidadinvisible y ayúdanos a dar visibilidad a este fenómeno oculto!