Cada año, el 21 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Paz. Para 2016, el lema elegido es «Los Objetivos de Desarrollo Sostenible: elementos constitutivos de la paz».
El pasado año, Naciones Unidas aprobó por unanimidad el cumplimiento de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, una serie de medidas que marcan la hoja de ruta para trabajar en los próximos años hasta 2030 para garantizar el fin de la pobreza y la prosperidad de las personas.
«Los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible son nuestra visión compartida de la humanidad y un contrato social entre los líderes del mundo y las personas. Constituyen una lista de acciones en favor de las personas y el planeta y un proyecto para alcanzar el éxito», ha señalado el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
La realidad es que los Objetivos de Desarrollo Sostenible son una herramienta indispensable para garantizar la paz en el mundo, ya que desarrollo y paz no pueden estar separados y tienen que darse de manera conjunta. Todos y cada uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible son elementos que garantizan la paz. Por ello, es responsabilidad de todos que trabajemos por su cumplimiento.
Los ODS tienen el objetivo de poner fin a la pobreza y el hambre; garantizar la salud, educación e igualdad de género para todas las personas; promover el acceso a agua limpia y saneamiento a la población, así como fomentar el uso de energías no contaminantes; reducir las desigualdades, fomentar la existencia de ciudades sostenibles y un ritmo de producción y consumo responsables; ser responsables con el clima, la vida submarina y la vida de los ecosistemas terrestres; garantizar la paz y la justifica y crear alianzas para lograr objetivos.