El cónsul honorario de Ucrania visita las instalaciones del convento de la Purísima de Alaquás, donde el Ayuntamiento de València a través del Centro de Atención a la Inmigración ha derivado a varias familias de refugiados de la invasión. Este centro, gestionado por Valencia Inclou, perteneciente a la Fundación Amigó, atiende desde hace semanas a un nutrido grupo de familias que huyen de la guerra provocada por la invasión rusa de Ucrania.
Durante su visita, Pablo Gil, cónsul honorario de Ucrania, ha podido contrastar el esfuerzo realizado por el equipo coordinado por Julián Salazar, director de Valencia Inclou, destacando la entrega y dedicación de los trabajadores –traductoras, educadores sociales, cocineros, trabajadores sociales- que consiguen con su compromiso que las familias que sufren la tragedia que supone ser un refugiado al menos puedan disponer de un nuevo hogar temporal en el que son tratados con calidez y solidaridad.
Desde el consulado honorario de Ucrania en la Comunidad Valenciana han agradecido el esfuerzo, iniciativa y liderazgo de Julián Salazar, que ya fue titánico durante la pandemia y la atención a las personas sin hogar, pero que ahora con los refugiados ucranianos ha conseguido superarse.
Del mismo modo, el cónsul honorario ha destacado también la labor de la Concejal del Ayuntamiento de Valencia Mayte Ibáñez, por el esfuerzo realizado en plena sintonía con la avalancha solidaria de la sociedad valenciana.
Esta visita se incluye dentro de la agenda de actividades del consulado honorario con las que se pretende agradecer y reafirmar el papel de numerosas entidades que dentro de su ámbito de actuación, se encuentran ofreciendo apoyo a las miles de personas que ya viven en nuestra Comunidad.
Grande Julián, siempre dedicación total al servicio social. Naciste para ello amigo.