Ayoub Hakim tiene 19 años y nació en Marruecos. Llegó a España como menor extranjero no acompañado y durante 3 años vivió en un centro de acogida de menores con una medida de protección. Al cumplir la mayoría de edad Ayoub tuvo que abandonar el centro, por lo que la intervención y el acompañamiento que se había desarrollado durante esos 3 años, iba a finalizar de forma precipitada.
Por su buena actitud, el joven fue derivado al Programa de Acompañamiento a la Emancipación (PAE) que la Fundación Amigó desarrolla con el objetivo de favorecer el proceso de maduración a una vida autónoma para menores y jóvenes en riesgo o conflicto social y que se lleva a cabo en las delegaciones de la entidad en Cantabria, Madrid y Valencia.
El programa ha permitido que Ayoub pueda vivir en un piso de emancipación, continuar su itinerario de inserción sociolaboral y consolidar su proceso de autonomía. Ahora, comparte piso con cuatro jóvenes en su misma situación y continúa recibiendo formación. “Llevo un año y medio en el PAE y noto que me siguen apoyando mucho. Me han ayudado a mejorar el castellano y a buscar trabajo. El año pasado hice un curso de jardinería y ahora estoy aprendiendo mecánica y haciendo prácticas laborales en una entidad”, señala Ayoub.
Elisabet Marco, coordinadora de programas de la Fundación Amigó en la Comunidad Valenciana, ha apuntado que «desde el PAE se realiza el acompañamiento en el proceso de inserción social y laboral de Ayoub. En este sentido, el programa interviene desde el acompañamiento y apoyo en diversos ámbitos. Por una parte, dado que el joven no dispone de medios económicos propios ni red familiar en España, el proyecto facilita los medios y necesidades básicas, incluida la vivienda, para que el joven pueda residir en el territorio y poder continuar con su evolución social y laboral».
El Programa de Apoyo a la Emancipación lleva a cabo actividades para facilitar el proceso de maduración, evolución y participación social de los jóvenes, atendiendo las necesidades, inquietudes y demandas que tienen, así como el acompañamiento emocional necesario para su proceso en vistas a la autonomía plena.
Gracias a las aportaciones de las personas contribuyentes que marcaron la casilla de Actividades de Interés Social en su declaración de la Renta, el año pasado se pusieron en marcha un total de 1.236 programas sociales como este, desarrollados por 469 entidades de acción social. En concreto, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, a través de la Secretaría de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, concedió una subvención de 100.000€ a Fundación Amigó para continuar realizando esta labor durante el año 2016.
Marcar la casilla “X Solidaria” es un gesto solidario que no cuesta nada, la persona contribuyente, al hacer la declaración de la Renta, no va a tener que pagar más ni le van a devolver menos. Además, también puede marcar la casilla de la Iglesia Católica junto con la casilla de Actividades de Interés Social y, destinar un 0,7 % a cada una de ellas. Simultaneando las dos casillas, la ayuda no se divide, se suma.