Carmen vivía con su hija graves situaciones de conflicto y desde hace dos años acude a nuestro Proyecto Conviviendo para reconducir la situación y volver a recuperar el vínculo afectivo.
“El trato ha sido muy cercano, muy individualizado, con mucho seguimiento. He visto cambios de conducta en mi hija, de la manera de tratarnos en la familia, de estar más pendiente de sus emociones, de no crear un conflicto y de ella no ser parte del conflicto».